El personaje

Mi  padre murió sin rencores hacia Elba Esther Gordillo

Carlos Jongitud Carrillo busca recobrar la dignidad del magisterio a través del Sindicato de Trabajadores de la Educación, que tiene medio millón de agremiados

Dedicado desde el 2009, en que decidió fundar el Sindicato de Trabajadores de la Educación (STE), bajo la mística de su padre, a buscar dignificar el papel de los profesores ante la sociedad, Carlos Jongitud Carrillo no niega en charla con RS haber  platicado en diversas ocasiones con Elba Esther Gordillo y tampoco  descarta una alianza ni con la CNTE ni el SNTE, “siempre y cuando se anteponga el interés por defender y hacer valer los derechos de los trabajadores”.

Hijo de quien fuera el dirigente de la Vanguardia Revolucionaria del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Carlos Jongitud Barrios, bajo cuya sombra sindical creciera la figura de Elba Esther Gordillo, el Consejero Nacional del STE indica que la corriente que encabezó su padre fue vital para la construcción de ideales entre los mentores,  al grado que llegaron a crear hasta un himno para los profesores del país.

Situado en medio de las posiciones de la SNTE y CNTE, este maestro de escuela normal, responde ante la pregunta de si su progenitor perdonó a Elba Esther luego de que en el gobierno de Carlos Salinas, desplazara a su mentor político. Sereno en la respuesta, Jongitud Carrillo, dice: “más que perdón, él entendió cuál fue su paso por esta vida y cumplió con trascender”.

Ante una matinal taza de café, confiesa que la vida sindical exige muchos sacrificios, los cuales experimentó en el seno familiar cuando como líder de los maestros del país, su padre tuvo que dejar de disfrutar tiempo con sus seres queridos “para regalárselo a los trabajadores”.

Convencido de que la labor sindical no debe implicar privilegios, Jongitud Carrillo asegura que un ejemplo de ello es lo que sucede con el STE, al no aceptar que los miembros de su comité gocen de comisión. Y añade: “Jacobo Hernández Corona, nuestro Secretario General, tiene 50 años de antigüedad laboral y sigue trabajando como supervisor. Yo tengo licencia sin goce de sueldo”.

Explica que el personal que labora en sus oficinas sindicales es pagado con recursos del propio sindicato. Para no interferir con sus actividades de docencia, los miembros de su comité desempeñan sus funciones los sábados desde las ocho de la mañana hasta desahogar todos los pendientes.

Indica que su organización cumple con todos los requisitos de ley y tiene presencia en los 32 estados del país. “No somos un sindicato de improvisados”, dice al asegurar que sin muchos aspavientos, ni marchas ni estridencias,  la membresía de su organización suma ya los 500 mil afiliados. Y añade que la Reforma Educativa saldrá adelante si se entiende que los profesores no pueden tener salarios dignos “con menos 4 mil pesos mensuales”.

Rememora cuando los ingresos de los mentores del país les permitían tener un aceptable nivel de vida, “podían comprar una casa, un vehículo para su familia, tener vacaciones; ahí estaban los Centros Recreativos del SNTE, ubicados en las principales playas. Hoteles limpios que hoy ya no están y si existen por lo menos no se promocionan y no alcanzan para todos”.

Carlos, ¿llegaste a platicar con tu padre de las cuestiones sindicales, te llegó a dar algún consejo, llegó a visualizar a su hijo como dirigente?, le cuestionamos. El fundador del STE, dice al respecto: “Mi padre desgraciadamente fallece en el 2011 y nosotros constituimos el STE en el 2009. Es claro que lo vio,  lo percibió y claro que fue una inyección de ánimo para él,  pero desgraciadamente ya eran 80 y tantos años. Ya no era fácil”.

¿Qué consejo recuerdas que te haya dado?

“Hablar con la verdad y pelear siempre por lo justo. Ese era su mejor consejo”, responde.

No podemos dejar de lanzar la pregunta obligada: ¿Crees que tu padre murió en paz con Elba Esther, la llegó a perdonar

Jongitud Carrillo, no rehúye la pregunta y apunta: “Es muy importante lo que me preguntas;  yo creo que en los vaivenes de la política más que el perdón, él entendió cuál fue su paso por esta vida y él cumplió con trascender. Lo demás dejó de importarle. Las personas que en su camino él pudo haber dejado como enemigos, o  como competencia o por traiciones, o  por infinidad de cosas, le dejaron de importar.

Lo que revisaba constantemente era cómo había sido el tránsito de él en su vida como profesional de la vida sindical, porque hay que ser un profesional en la vida sindical, No basta con ser un encumbrado académico, la vida sindical exige de nosotros, profesionalismo y educación. Por eso hemos propuesto a varias universidades el método para abrir una maestría en estudios sindicales”, puntualiza.

De trato sencillo y directo, Jongitud Carrillo tampoco rehúye otro de nuestros cuestionamientos: ¿Has platicado con la maestra Elba Esther?

No regatea la respuesta y dice: “Sí, claro que hemos platicado”.

¿Qué han comentado?

Agrega: “Son cuestiones que a lo mejor no vienen al caso, porque ella tiene su historia y yo tengo la mía; entonces,  no estamos en el mismo camino, no estamos luchando por lo mismo, pero si hemos comentado”.

¿Y qué más han comentado?

“Que tenemos que apoyar a los profesores, eso sí lo comentamos; que en cualquier escenario tenemos que apoyar a los trabajadores pues es a  final de cuentas lo que para nosotros es causa de vida. Somos profesionales de la vida sindical”.

Inquirimos: ¿Platicaste con ella, antes de su encarcelamiento o después?

“No voy a rehuir tu pregunta: he platicado con ella en más de una ocasión. Con eso ya tú puedes responderte si he platicado antes, después o cuándo”.

¿Qué propuestas del STE se pueden ver reflejadas en la nueva Reforma Educativa?

El hombre que lleva tras sus espaldas la figura de uno de los dirigentes más emblemáticos del magisterio en el país, destaca: “La dignificación del trabajador. Si por algo hemos peleado es porque se dignifique al trabajador. Otra de las propuestas es que el trabajador tienda a ser el mejor, son propuestas muy claras del sindicato.

Otras más son la democratización, la rendición de cuentas y la transparencia. El STE lo tiene en su identidad y en su lucha por una Educación Social con Futuro de Clase Mundial, ése es el lema del STE y que está impregnado en la reforma”, dice convencido de la ruta de su organización por recobrar el respeto de los maestros ante la sociedad.

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